La Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) recomiendan que los bebés sean alimentados con leche materna dentro de la primera hora después de su nacimiento y que se les amamante exclusivamente durante los primeros 6 meses de vida*.
Y a partir de los seis meses de edad, se recomienda introducir alimentos complementarios seguros y adecuados, mientras se continúa amamantando hasta los dos años de edad o más.
¿Qué es la lactancia materna exclusiva?
La lactancia materna exclusiva se refiere a cuando el bebé se alimenta únicamente de leche materna durante los primeros seis meses de vida, sin recibir ningún otro alimento o líquido aparte de la leche materna. Durante este periodo, la leche materna proporciona todos los nutrientes necesarios para el crecimiento y desarrollo óptimo del bebé. Es rica en proteínas, grasas, carbohidratos y anticuerpos que ayudan a proteger al bebé contra enfermedades e infecciones.
Durante este período, no se deben ofrecer otros alimentos o líquidos, incluyendo el agua. Es importante que los bebés sean amamantados a demanda, es decir, cada vez que lo soliciten, tanto de día como de noche. Además, se aconseja evitar el uso de biberones y chupos.
Beneficios de la lactancia materna exclusiva
La lactancia materna exclusiva tiene numerosos beneficios tanto para el bebé como para la madre.
Para el bebé, reduce el riesgo de enfermedades respiratorias, gastrointestinales, alergias y obesidad, desnutrición. Reduce de 1.5 a 5 veces el riesgo de muerte súbita (Heyman, Jody, et al, 2013). También promueve un mayor vínculo emocional entre la madre y el bebé, y se ha relacionado con un mejor desarrollo cognitivo y emocional a largo plazo.
Para la madre, la lactancia materna exclusiva ayuda en la recuperación posparto, ya que la succión del bebé estimula la liberación de oxitocina, una hormona que ayuda a reducir el sangrado uterino y a contraer el útero. Ayuda a bajar de peso Además, se ha demostrado que la lactancia materna exclusiva disminuye el riesgo de desarrollar cáncer de mama y ovario, así como enfermedades cardiovasculares y diabetes tipo 2.
Qué es la lactancia materna complementaria y cuándo iniciarla
Después de los seis meses de edad, se introduce la lactancia materna complementaria. Esto implica que, junto con la leche materna, se introducen gradualmente alimentos sólidos y líquidos en la dieta del bebé, mientras se mantiene la lactancia materna. Durante esta etapa, la leche materna sigue siendo una parte importante de la alimentación del bebé, pero ya no es la única fuente de nutrientes.
La lactancia materna complementaria permite que el bebé experimente diferentes sabores y texturas, y le brinda los nutrientes adicionales que necesita para continuar su crecimiento y desarrollo. Se recomienda continuar la lactancia materna hasta los dos años de edad o más, combinada con una alimentación variada y equilibrada.
Es importante destacar que la lactancia materna complementaria no debe reemplazar la leche materna por completo. La leche materna sigue siendo una fuente esencial de nutrientes, inmunidad y vínculo emocional entre la madre y el bebé. Además, la lactancia materna complementaria debe realizarse de manera adecuada y segura, introduciendo gradualmente alimentos adecuados para la edad y evitando aquellos que puedan representar un riesgo para el bebé, como la miel, los alimentos muy salados o azucarados, y los alimentos potencialmente alergénicos.
En conclusión
En conclusión, los periodos de lactancia materna exclusiva y complementaria desempeñan un papel fundamental en el crecimiento y desarrollo saludable de los bebés. La lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses proporciona todos los nutrientes necesarios, mientras que la lactancia materna complementaria introduce gradualmente alimentos sólidos y líquidos en la dieta del bebé después de los seis meses, mientras se mantiene la lactancia materna.
Ambos periodos tienen beneficios significativos para el bebé y la madre, y se recomienda seguir la lactancia materna durante el mayor tiempo posible, combinada con una alimentación equilibrada y adecuada para la edad del bebé.